Día 20: Munich (Fussem)

Me levanto a las 8, y tras comprar algo para desayunar en el super, voy a la estación de tren que es el punto de partida para estas visitas guiadas.
Hay una docena de españoles para este tour que sale por unos 20 euros. Cogemos el tren rumbo a Fussem, y tras hacer un transbordo, sobre las 12 llegamos a la zona de los castillos. La guía, que es madrileña, nos explica un poco la historia de los castillos, hay 2, aunque nosotros solo visitaremos el más famoso. Quien desee entrar en el castillo debe pagarlo aparte, yo decido entrar, junto a unos chicos de Valladolid y Madrid. El resto del grupo, solo ha venido hasta aquí para hacer fotos, y al poco tiempo se van en otro tren que sale antes.

Castillo de  Neuschwanstein

Entrada al castillo

Patio interior del castillo
Lamentablemente no se pueden hacer fotos del interior del castillo, pero os puedo asegurar que merece la pena entrar, eso sí, como podéis apreciar en la primera foto, nada es comparable con la belleza del exterior y de los paisajes que se pueden contemplar desde los alrededores, especialemente desde un desfiladero que existe frente al castillo.

Desfiladero, desde donde se puede observar el castillo

Paisajes desde el Castillo
Como se puede observar en esta última foto, existe otro castillo, pero ese no se visita, al menos con este grupo.
Para almorzar nos pedimos una salchicha en unos bares que hay bajo el castillo. Hago buena amistad con los  otros chavales, nos contamos las experiencias del viaje, ellos también están de interrail y curiosamente con un itinerario muy similar al mio, aunque ya esta noche se van para Paris, su último destino.
La vuelta en tren se alarga un poco más por un pequeño problema, pero al final llegamos con poco retraso. Ha sido una excursión formidable, el lugar es precioso, tengo que volver algún día, a ser posible en invierno, para verlo todo nevado.
Ya en Munich, doy una vuelta por MarienPlatz y me pido para cenar, un kebab con patatas fritas. Me conecto a internet en un ciber cercano al hostel y a descansar, que estoy destrazado. aunque antes charlo un rato de fútbol con mis compañeros ingleses de la habitación.

Día 19: Salzburgo y Munich

Amanece lloviendo y hace frio, en pleno mes de julio...El desayuno hay que pagarlo en el hostel, pero merece la pena, así hago una comida fuerte y luego almorzaré menos.
Empiezo el día visitando la casa donde residió Mozart, y luego completo la ruta del famoso músico visitando la casa donde nació. Aquí todo está relacionado con Mozart, y no es que yo sea un fanático de este personaje, pero con el día tan desapacible que hace lo más recomendable es estar bien cobijado jeje...
Son interesantes, pero repito, para alguien que no sea un gran seguidor de Mozart, visitar las 2 casas puede resultar un poco cansado, tienen algunos instrumentos de él, composiciones, imágenes...

La casa donde nació Mozart

La Casa donde vivió Mozart

Luego, decido "tirarme" a la calle a pesar de la climatología, me pongo un chubasquero que me está salvando la vida en este viaje jeje, y decido subir a la Fortaleza. Es un paseo considerable desde el centro de la ciudad hasta subir al castillo, pero las vistas que se aprecian desde lo más alto merecen la pena, eso y poco más, porque el contenido interior me ha dejado mucho que desear.

La fortaleza, desde abajo

Salzburgo, visto desde la Fortaleza

Llega la hora de almorzar, y en la calle principal que está repleta de tiendas y restaurantes, decido comer pizza y luego voy  a un restaurante que viene a ser un mc donalds pero de productos del mar, así que me pido una hamburguesa de pescado que está bastante rica.

La calle más centrica
La verdad es que el día está feísimo, y es una lástima porque da gusto pasear por la ciudad, es muy bonita, así que antes de irme rumbo a Munich, doy un paseo junto al río donde hay un pequeño mercadillo y además aprovecho para comprar algunos regalos, especialmente unos bombones de Mozart jeje, y sobre las 5 de la tarde cojo el tren para la capital de Baviera. me voy antes de lo previsto, pero repito, el día no invita a estar en la calle.
El tren es muy bueno, y en apenas hora y media estoy de nuevo en tierras alemanas. El hostel es muy bueno y está en una calle repleta de hostels, frente a la estación de tren, además, hay muchísimos lugares para comer en esa zona. Pero lo mejor es que por sorpresa para mí, el centro de la ciudad está a apenas 10 minutos andando, así que no lo dudo y antes de cenar quiero hacer una primera toma de contacto con Munich jeje.

MarienPlatz, Munich

El centro muniqués está repleto de tiendas, y la verdad es que la primera impresión ha sido muy buena, es una ciudad que sabe mezclar lo clásico y lo moderno, me gusta.
Vuelvo a la zona del hostel y para comer, CurryWurst, que ya tenía ganas de probarla, y está muy rica. Y nada a descansar, que mañana me espera un día duro, quiero visitar los castillo del rey loco, a una hora de aquí, y lo haré con una visita guiada en español, vale dinero pero merecerá la pena, además seguramente coincidiré con más españoles.